Sector lácteo mundial resiste a pesar de las restricciones por el COVID-19
A pesar de las restricciones por el corona virus, las personas tienen que seguir alimentándose y las vacas tienen que seguir ordeñándose.
La plataforma GDT ha mostrado caídas en las últimas licitaciones, aunque no han sido tan significativas dada la situación económica mundial. Es cierto que se está por debajo de los precios de comienzos de 2019, pero no se trata de precios nunca vistos. Esta situación seguramente es coyuntural dado que los fundamentos de demanda eran fuertes desde inicios del año y amortiguaron el efecto COVID-19 en las últimas licitaciones.
Todos los mercados han caído de forma significativa. Y en el tiempo que viene el sector lácteo mundial estará más acoplado a lo que ocurre en los demás mercados de commodities, incluido el petróleo.
¿Qué está pasando con la producción en los principales países exportadores?
En Nueva Zelanda se ha declarado desde hace una mes la emergencia por sequía; la producción total no cambiará esencialmente en el ejercicio 2019-2020. Australia ha comenzado a recuperarse de la sequía, pero la producción ha venido sistemáticamente cayendo en los últimos años; la recuperación llevará su tiempo. En el Hemisferio Norte la producción viene en aumento y se refuerza por el pico en la primavera del norte. En EE.UU el último dato de producción mostró un incremento superior al de los últimos meses. En Europa también ha aumentado (aunque en menor medida) aunque se esperan efectos adversos por problemas climáticos y falta de suministros alimenticios.
¿Cómo están reaccionando los principales exportadores: Nueva Zelanda y la Unión Europea?
La condición de país insular de Nueva Zelanda, paradigma de la lechería mundial, tendría ventajas por esta situación geográfica. Pero nos encontramos en una economía global. Las medidas tomadas son similares a las del resto del mundo. En la elaboración de productos lácteos, las industrias continúan operando en sus procesos esenciales de manufactura, mientras que fuera de éstos las personas están trabajando desde sus casas.
En la UE, el Consejo Europeo de la Leche ha solicitado a la Comisión Europea realizar un esquema de reducción voluntaria en la producción de leche, debido a que el incremento de la producción supera la demanda, mermada por el COVID-19. La medida solicitada fue implementada por última vez en 2016 cuando explotó la producción en Europea por la eliminación de las cuotas lácteas.
¿Qué pasa con la demanda?
Por el momento la demanda mundial de productos lácteos se encuentra estable, a pesar de los efectos negativos del COVID-19. Sin embargo es obvio que la demanda se restrinja en varios países. Aunque ya se ha mencionado, cabe destacar que las expectativas de los exportadores están puestas en China. En principio se creyó que China contraería sustancialmente la demanda pero actualmente ha comenzado a comprar nuevamente.
Fuente: elaborado por INALE en base a informe mensual de la Bolsa de Valores de Nueva Zelanda
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