Resultados de GDT: análisis de setiembre

No puede desconocerse que hay una situación mundial que es inestable, pero se rescatan factores positivos para el mercado de lácteos en la situación actual.

La oferta mundial de leche sigue estando bajo presión, no solo en Nueva Zelanda y la Unión Europea, sino en EE.UU cuya tendencia ha sido ascendente en los últimos años; el Departamento de Agricultura de EE.UU (USDA) revisó a la baja la proyección de la producción de leche para ese país para los próximos meses. Del lado de la demanda, Asia (sin contar China) y Medio Oriente están contribuyendo al sostenimiento de los precios actuales y los principales analistas de mercado confían en que la demanda que venga eventualmente de China continúe también dando respaldo a los precios. En esta situación no es esperable una caída de los precios.

No se puede ignorar la incertidumbre macroeconómica global de los últimos 9 meses. En 2021 la economía mundial creció 6.1%, mientras que se espera un crecimiento menor de 3,2% para 2022 y 2,9% para 2023 (FMI, WEO, julio 2022). Los problemas macro de corto plazo siguen dominando. Probablemente la Reserva Federal suba la tasa de interés antes de comenzar octubre, lo que fortalecerá más el dólar y contribuirá a la reducción del poder adquisitivo de los importadores. Más hacia el largo plazo, la inflación internacional no es un factor que vaya disolverse en los próximos meses y golpea a los consumidores de todas partes.

En Global Dairy Trade, se van a integrar nuevos licitadores a la plataforma, incrementando la demanda en relación a las expectativas de las últimas licitaciones. Esto es visto como otro aspecto positivo para mantener los precios.  Es probable que los precios de la LPE y LPD continúen sostenidos en los niveles actuales.

Fuente: elaborado por INALE en base a Bolsa de Valores de Nueva Zelanda

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